Puertas Cortafuegos Correderas

En Portis encontrará Puertas Cortafuego industriales y residenciales que se adaptan a sus necesidades.

Las puertas correderas cortafuego de Portis son la mejor solución para la sectorización, tanto en áreas industriales como en edificios públicos.

Las puertas cortafuegos están diseñadas para evitar la propagación del fuego y el humo en un edificio. Están hechas de materiales resistentes al fuego y diseñadas para cerrarse automáticamente en caso de incendio.

El uso más común de las correderas cortafuegos suele ser en zonas donde normalmente permanecen abiertas, gracias al sistema de retención electromagnética. En caso de incendio, se activa el cierre de la puerta y se corta el suministro eléctrico, el sistema de contrapesos es el que provocará el cierre de la puerta.

Contamos además con las puertas peatonales cortafuego con o sin ojo de buey que están diseñadas para uso en edificios residenciales y públicos, puertas contraincendios de alta fiabilidad y seguridad. Es importante elegir unas puertas cortafuegos cuya calidad asegure la mayor resistencia y seguridad.

La puerta cortafuego es un elemento de seguridad imprescindible de cualquier tipo de edificio, su función es clave tanto para ralentizar la expansión de un incendio y ayudar a extinguirlo, como para salvar las vidas de las personas en su interior.

Suministrada en paneles cortafuegos con relleno aislante de placas de yeso y lana de roca. Provistos de colgaderos superiores que se desplazan horizontalmente por una guía carril. La posición normal de estas puertas es abierta, retenida por un electroimán. Una vez activado el cierre de la misma (una señal de detección de incendios, corte en el suministro eléctrico...) el sistema de contrapesos provocara el cierre de la puerta.

Para una puerta EI260 con puerta peatonal insertada: 3680 x 3180 mm.

Para una puerta EI2120 con puerta peatonal insertada y ojo de buey: hasta 4200 x 4260 mm.

Para una puerta EI290 telescópica: hasta 4120 x 4290 mm.

Para el resto de medidas contacte con nosotros.

Portis dispone de puertas correderas cortafuegos de una sola hoja o de dos hojas telescópica, siendo el grosor de la hoja 80 mm, con un peso aproximado de 55 kg/m2 y se suministran en chapa galvanizada / prelacada.

Accionamiento

Apertura automática (apertura eléctrica) y cierre mecánico por contrapeso. Para la elección del accionamiento es preciso tener en cuenta además la construcción de la puerta (doble hoja o telescópica) y el nº de ciclos/día previsto.

Equipamiento estándar

Electroimán con placa.
Amortiguador neumático de impacto final 3095.
Termo fusible.
Amortiguador Radial Hidráulico, (recomendable para hojas a partir de 12 m2, caso manual)

Accesorios

Sistema autónomo de detección consistente en:
Detector de humo y temperatura serie RM2000 (recomendamos dos unidades : exterior e interior)
Fuente de alimentación 220 VAC/24VDC 400mA.
Pulsador de accionamiento manual.
Dispositivo electromagnético 560l en caso de que se requiera detección de obstáculos.
Retienen la puerta en cualquier posición mediante un cable de acero hasta que la alimentación eléctrica sea interrumpida. Con cuadro de maniobra G con acumulador y alimentación de emergencia y fotocélula con espejo

Clasificación resistencia al fuego de las puertas cortafuego

Existe un principal indicador, determinado a través de los ensayos a los que son sometidas las puertas, podemos clasificarlas según el tiempo de resistencia al fuego (medida en minutos) en: EI2 60, EI2 90, EI2 120. La reglamentación española exige el EI2 el siguiente número indica los minutos de resistencia al fuego.

Características Puerta Cortafuegos Portis

Resistencia frente al fuego: las puertas cortafuegos Portis están hechas de materiales como acero galvanizado o vidrio resistente al calor, con una clasificación de resistencia al fuego muy específica. Ofrecen un aislamiento térmico que aisla y reduce la transferencia de calor a través de la puerta.

Protección contra la propagación del fuego y el humo: Las puertas Portis cortafuegos ayudan a limitar la propagación del fuego y el humo en un edificio, con lo que se consigue salvar vidas y reducir los daños en el edificio. Gracias al sellado especial en las juntas, se evita que el humo y las llamas pasen a través de las grietas alrededor de la puerta.

Cierre automático: Muchas puertas cortafuego están diseñadas para cerrarse automáticamente en caso de incendio, con lo que se aislan las áreas afectadas y se evita que el fuego se propague.

Cumplimiento de la normativa: las puertas cortafuegos Portis cumplen con las regulaciones locales y estatales, ayudando así a reducir el riesgo de sanciones legales y financieras.